La flexibilidad metabólica es la capacidad que tiene nuestro cuerpo para adaptarse y obtener energía de diferentes nutrientes de la forma más efectiva. Nuestro cuerpo tiene la capacidad de utilizar carbohidratos y grasas como sustratos energéticos, según las demandas del cuerpo y la disponibilidad de nutrientes. Por ello, si una persona cuenta con una buena flexibilidad metabólica podrá usar los nutrientes de manera eficiente.

A pesar de que esta capacidad depende en gran medida de la genética, también influyen factores como el ejercicio y la dieta. Por ello, los expertos en Nutrición de Club Metropolitan nos dan algunos consejos para mejorar nuestra salud metabólica.

Evaluación personal:

Evaluar el estado de tu metabolismo a través de pruebas de sensibilidad a la insulina o de metabolismo basal es el primer paso. De esta forma podrás saber cuál es tu estado actual y ajustar tus hábitos. En este punto recomendamos que contactes con un profesional de Nutrición de Club Metropolitan para que pueda darte pautas sobre tu caso en concreto, pero de manera general también puedes seguir los siguientes consejos.

Entrenamiento de fuerza:

Incorporar ejercicios de fuerza ayuda a aumentar la masa muscular, lo que a su vez mejora la sensibilidad a la insulina y la capacidad del cuerpo para utilizar la glucosa y las grasas como energía.

Entrenamiento de resistencia:

Los deportes de resistencia como el Cross-hiit ayudan al cuerpo a mejorar la capacidad para almacenar y utilizar glucógeno muscular, lo que mejora la flexibilidad metabólica durante el ejercicio de alta intensidad.

Periodización de carbohidratos:

Consumir una dieta equilibrada que proporcione al cuerpo diferentes fuentes de energía es fundamental para un buen metabolismo, pero también se recomienda ajustar la alimentación en función del esfuerzo que vayamos a realizar. Por ello debes consumir más carbohidratos cuando vayas a realizar entrenamientos intensos y menos carbohidratos en días de descanso o de menor actividad.

Entrenar por intervalos:

El entrenamiento de intervalos, que implica alternar entre períodos de alta intensidad y recuperación, puede mejorar la capacidad del cuerpo para quemar tanto carbohidratos como grasas durante el ejercicio.

Suplementos específicos:

Algunos suplementos como los ácidos grasos omega-3, magnesio y vitamina D pueden ayudar a mejorar la sensibilidad a la insulina y la utilización de grasas como fuente de energía.

Al integrar estos consejos en tu estilo de vida, puedes mejorar tu flexibilidad metabólica y tu salud en general. Recuerda que estos cambios no son inmediatos y que cada persona es diferente, por lo que lo ideal es ponerse en manos de profesionales de la salud.

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